martes, 22 de septiembre de 2009

entra el otoño

De acuerdo al Instituto Geográfico Nacional de España, el otoño de 2009 llega este 22 de septiembre a las 23h 19m hora oficial peninsular.

Como estamos en el horario de verano, que va adelantado dos horas respecto a la "hora del sol", eso equivale a lo que encontramos en una de las páginas de la Armada Española, el otoño comienza el 22 de septiembre a las 21:19 horas de Tiempo Universal.

La existencia de las cuatro estaciones, primavera, verano, otoño e invierno, depende del hecho de que la Tierra se traslada alrededor del Sol en un plano, el plano de la eclíptica, y gira respecto a un eje que no es perpendicular a dicho plano.

Mientras la Tierra se traslada anualmente alrededor del Sol describiendo muy aproximadamente una elipse, el eje de rotación del giro diurno se mantiene esencialmente paralelo a sí mismo.

En la siguiente figura se muestra el Sol, la órbita elíptica de la Tierra a su alrededor, y la posición de la Tierra el día de inicio de cada estación (nombradas con el mes correspondiente). La esferita que representa a la Tierra en cada uno de esos cuatro instantes tiene una flecha verde, que representa el eje de rotación. Las flechas verdes en cada una de las posiciones son paralelas.



Hay 3 ejes, orientados a derechas, elegidos de acuerdo a la elipse que describe la Tierra alrededor del Sol: x según el eje mayor, y según el eje menor y z perpendicular al plano que contiene la órbita, dirigido para que esa órbita se recorra en sentido antihorario vista desde "arriba" (valores positivos de z), como se presenta la figura. La rotación diurna de la Tierra alrededor de su eje se produce en el mismo sentido antihorario.

El Sol está en uno de los focos de la elipse, cuya excentricidad se ha exagerado sobremanera para mostrar que el Sol no está en el centro de la elipse. Se ven las posiciones del perihelio y del afelio, sobre el eje x.

Los dos equinoccios correponden a los dos puntos sobre la elipse en que el eje de rotación terrestre es perpendicular al vector Tierra-Sol: los rayos de Sol inciden sobre una mitad de la superficie terrestre que incluye a la vez ambos polos Norte y Sur. A lo largo de las 24h en el equinoccio, cualquier punto de la Tierra esta 12h "al sol" y 12h "a la sombra". En el ecuador terrestre el Sol culmina en el cenit.

La línea de los equinoccios está por tanto determinada por la orientación del eje terrestre respecto al plano de la eclíptica.

La línea que une los dos solsticios es perpendicular a la que une los equinoccios. El ángulo entre el vector Tierra-Sol y el eje de rotación alcanza sus valores extremos precisamente en los solsticios, el mayor ángulo en el solsticio de diciembre y el menor en el de junio. La duración de los días y noches alcanza sus valores extremos (más largos los días y cortas las noches en un hemisferio, al revés en el otro). En el solsticio de diciembre, sobre el trópico de capricornio el sol culmina en el cenit; en el solsticio de junio culmina en el cenit sobre el trópico de cáncer.

En la posición de la Tierra en el inicio de la primavera se muestra un detalle adicional. La flecha verde se prolonga con una línea que llega hasta un círculo rojo. Lo que pretende representar ese círculo es el cambio en la orientación del eje terrestre, y por tanto de la línea de los equinoccios, lo que se llama precesión de los equinoccios. Pero ese cambio es muy, muy, muy lento: se daría una vuelta a todo el círculo rojo en unos 26000 años. Aun siendo lento, es importante observar el sentido de la precesión, marcado por la flecha sobre el círculo rojo, un sentido horario, por tanto contrario a los sentidos de la traslación anual y la rotación diurna. Ello hace que el primer punto de Aries (la posición aparente del Sol visto desde la Tierra el día del equinoccio de marzo) avance al encuentro de la Tierra, y que el año trópico sea menor que el año sidéreo (en este momento es más fiable la wikipedia inglesa en lo que se refiere al año trópico).

Otro detalle crucial mostrado en la figura es que la línea de los solsticios no coincide con el eje mayor de la elipse. Como la figura es una vista "de lado", para apreciar mejor ese detalle podemos mirar desde arriba, perpendicularmente al plano x-y.



Aunque la figura no es realista respecto a la excentricidad de la órbita (para mostrar el Sol apartado del origen), sí es fiel en mostrar el ángulo entre el eje mayor de la elipse y la línea de los equinoccios. El ángulo desde el vector Sol-punto de Aries hasta el vector Sol-perihelio, o distancia angular, es ahora de aproximadamente 103,07º y se va incrementando por la precesión de los equinoccios. Ahora la Tierra llega al perihelio 13,07º después de pasar por el solsticio de diciembre. Esto es bastante relevante para la ecuación de tiempo, pero eso lo dejaremos para otro día.

Hoy me interesa dejar una referencia a otro sitio más del gobierno estadounidense, magnífico, el del Jet Propulsion Laboratory, con una página web para calcular efemérides de los cuerpos del sistema solar. Seleccionando en la interfaz web como cuerpo de observación la Tierra, y cuerpo observado el Sol, podemos obtener las coordenadas astrométricas del Sol Ascensión Recta y Declinación respecto a un sistema de referencia ecuatorial referido al equinoccio en la época J2000 (aproximadamente las 12h del 1 de enero del año 2000).




Si buscamos el momento concreto (al nivel de minuto horario) en que la declinación del Sol pasa de ser positiva a ser negativa, y la ascensión recta pasa por las 12h, encontramos



que la entrada del otoño es el 23 de septiembre a las 00h 36minutos de Tiempo Universal, unas 3h y 17 minutos después de lo que dice la Armada Española. Pero claro, nuestra Armada no se equivoca. Esas coordenadas marcan el paso del Sol por el ecuador celeste de la época J2000, no el actual que es lo que importa. En estos 9 años y pico, más concretamente 3552 días desde esa época J2000 de referencia hasta hoy 22 de septiembre de 2009, el punto de Aries se ha adelantado por la precesión de los equinoccios el ángulo justo correspondiente a esa diferencia horaria, hasta una posición a la que el Sol llega 197 minutos horarios antes de llegar a la que tenía en J2000.

Y el poder de internet nos permite comprobarlo si no nos fiamos. Hay un estupendo y gratuito software para cálculos astronómicos, SOFA Standards of Fundamental Astronomy, con rutinas en C o Fortran para, entre otras cosas, calcular la matriz de precesión. Y todo gratis, con documentación, una maravilla, viva la IAU. Lo único es ... entenderlo, y hacer el programita, compilar, ejecutar ... y mejor en C, que el Fortran me recuerda tarjetas perforadas.

Como antes de esto estaba en otras cosas aprendiendo a manejar rudimentariamente Octave, un programa de cálculo numérico semenjante a Matlab pero GRATIS TOTAL, he visto que es viable mirar las rutinas C necesarias, rehacerlas en Octave, con el poder matricial de su lenguaje, y llegar a un resultado que dentro del margen de dos minutos coincide de pleno con lo que nos dicen las autoridades. En este caso las autoridades tienen ese sentido de referencia fiable a la que recurrir para comprobar que un cálculo propio es correcto, como mirar la solución al final del libro.

Además de todo ese software gratuito no puedo olvidarme de otro hallazgo estupendo con el que hice las dos primeras figuras: se trata de winplot, otra joya que agradecer a los generosos donantes que comparten sus programas, en este caso con nombre y apellidos.

Y para recibir al otoño terrestre, en el JPL hay un video Equinox at Saturn muy a cuenta del día, para recordar que no sólo hay equinoccios en la Tierra, también en Saturno, aunque las estaciones son "un poco" más largas.

martes, 8 de septiembre de 2009

sorpresas del diccionario

En la temática relativa a la astronomía hay una gran cantidad de términos especializados que resultan tan curiosos y raros como los de la anterior entrada. Por ejemplo en las zonas polares en que habitan los periscios se da el fenómeno de los días y las noches polares. Durante ciertos meses el sol no se pone, y es por tanto un astro inocciduo, pues el término occiduo se refiere al ocaso. En otros meses la noche es permanente, el sol no llega a salir, y es entonces un astro inortivo, pues ortivo se refiere al orto. En el resto de latitudes fuera de las polares el sol sale y se pone cada día, y es por tanto un astro ortivo y occiduo. La salida y la puesta del astro, su orto y su ocaso.

Además de palabras raras, hay palabras más comunes pero sobrecargadas de significado. Meridiano es una palabra bastante común, quién no ha oído hablar del meridiano de Greenwich. Pero estudiando la entrada del DRAE vemos una amplia variedad de significados. En geografía el meridiano puede ser o un círculo o un semicírculo. Esta última opción es la más común, pues asocia a cada meridiano, como semicírculo, una longitud única entre -180º y +180º. Precisamente el de Greenwich se usa normalmente como primer meridiano, es decir, como origen de medida de la longitud geográfica.

En astronomía pasamos de la esfera terrestre a la celeste, y el meridiano del lugar en que nos encontremos es un
círculo máximo de la esfera celeste, que pasa por los polos del mundo y por el cenit y el nadir
de ese lugar. Ese meridiano astronómico puede dividirse en dos semicírculos, el meridiano inferior por debajo de nuestro horizonte, y el meridiano superior por encima.

Es pura poesía el ritmo cósmico de palabras tales, "círculo máximo", "esfera celeste", "polos del mundo", "cenit y nadir". El DRAE está lleno de entradas "poéticas", de asombrosa belleza, más allá de que se entienda o no qué se trata de definir.

Y junto a la poesía y la ampliación técnica de conocimientos hay sorpresas como enterarse de que además, aunque sea poco usada, meridiano tiene la acepción de "Siesta que se hace después de comer". De modo que podremos decir jocosamente "voy a echarme el meridiano", ¿o será "voy a hacer el meridiano"?

Interesante también es la referencia de meridiano a mediodía. Es justo al mediodía cuando el sol atraviesa el meridiano local, cuando culmina alcanzando su máxima altura sobre el horizonte, siendo más claro y luminoso. En las tierras del hemisferio norte que alumbraron los significados de las palabras, a la hora del mediodía el sol marca el Sur, y meridional indica referencia al sur.

La palabra "opuesta", bien conocida, que hace referencia al norte, es septentrional, que me ha dado otra sorpresa etimológica. Pues septentrional hace referencia al norte y a septentrión, término este que procede del latín septem, siete, y de trio, -onis, buey de labor. En mi DRAE de papel, de la vigésima primera edición, la primera acepción de septentrión es ... Osa Mayor. ¡Vaya! Y vaya chasco, que esa acepción no aparece en la consulta en línea del buscón, edición vigésima segunda.

A posteriori he encontrado en la wikipedia esa misma etimología, indicando más claramente que los siete bueyes son las siete estrellas del carro. Curiosamente ese asterismo concreto se llama en inglés "big dipper", el gran cazo, y en efecto es más fácil ver el cazo que el carro, pues al carro hay que quitarle las ruedas. Según la wikipedia en inglés, "big dipper" se usa en USA y Canada, mientras que en el Reino Unido e Irlanda se usa el término "the Plough", el Arado. Es lo que tienen las estrellas.

Sobre las diferentes ediciones del DRAE, no solo desaparecen acepciones como la de Osa Mayor para septentrión, sino que hay cambios en la redacción. Una de las palabras curiosas encontradas al azar en mi DRAE de papel es serosidad, "líquido que ciertas membranas segregan en el estado normal, y que en el morboso forma las hidropesías". Ahora al parecer se ha perdido el estado morboso en beneficio de una acumulación patológica. Quizá esté más claro, pero hay expresiones que tienen su morbo. Y continuas candidatas a expresiones ofensivas, "amorfa hidropesía inoccidua", o de desprecio, "insignificante asterismo inortivo" :-)

lunes, 7 de septiembre de 2009

sorpresas de internet

Ay, lagrimones de risa brotan irreprimibles de mis pupilas que no dan crédito a qué se puede encontrar uno buscando algo en internet. El caso es que estaba mirando temas relacionados con la astronomía, que para eso es su año internacional. Estoy disfrutando una de esas joyas impagables, ejemplo de gran autoría y esmerada edición: "The history and practice of ancient astronomy", de James Evans.

Uno de los problemas al leer un libro en lengua extranjera es que es fácil encontrar términos técnicos de difícil o incierta traducción. Muchas veces el término adecuado se encuentra en el DRAE, y uno llega a curiosas palabras de nuestro idioma cuya existencia nunca hubiese sospechado.

Un ejemplo, al tratar la división del globo terráqueo en diferentes zonas de acuerdo al comportamiento del Sol a lo largo del año por la inclinación del eje terrestre respecto a la eclíptica. James Evans se refiere al Almagesto de Ptolomeo y cómo éste llama a la región entre los trópicos (de cáncer y capricornio) amphiskian, palabra compuesta del griego amphi, ambos lados, y de skia, sombra; pues en esa zona la sombra del sol al mediodía en el curso de un año puede estar tanto al norte como al sur del gnomon. Las dos zonas entre cada trópico y el correspondiente círculo polar son heteroskian (heteros = a un lado) pues la sombra del sol a mediodía siempre cae en la misma dirección durante todo el año. Las dos zonas entre el circulo polar y el correspondiente polo son periskian (peri = alrededor de) pues en ellas durante algunos días del año el sol no se pone, y su sombra hace un recorrido de 360º alrededor del gnomon.

No pensaba que existirían términos semejantes en el DRAE, tonto de mí cuando se trata de palabras de origen griego, pero aquí están los respectivos términos castellanos: anfiscio, heteroscio y periscio. Además de ser hermosas e inusuales palabras, podrían funcionar bien como improperio.

Otras palabras usadas para describir antiguos instrumentos en astronomía son, en inglés dioptra y cross-staff. Precisamente en castellano también existe dioptra como término un tanto general en su origen etimológico (instrumento para hacer mediciones a distancia). El DRAE remite a otras dos palabras, pínula y alidada. La descripción de una de las imagenes del libro de Evans muestra una "simple dioptra consisting of a stick with two sigths". Con la definición del diccionario más la búsqueda de imágenes en Google bajo uno y otro término, puedo llegar a traducir stick como alidada, y "two sigths" como dos pínulas, y el conjunto sería una alidada de pínulas. En cuanto a cross-staff, se refiere a la ballestilla o cayado de Jacob o cruz de palos.

Bueno, el caso es que cuando estaba viendo imágenes encontradas con Google para alidada, me encontré con ... esta alidada, que me reveló la existencia de este universo particular. Esto si que es fomentar el conocimiento astronómico, al menos entre el género masculino. Contemplen los planetas de nuestro sistema solar y elijan su favorito. Ay, espero que la Union Astronómica Internacional premie de alguna forma la labor divulgadora de D. Juan Aznar, que al parecer es el responsable de este original sitio.